jueves, 11 de julio de 2013

 Signos cualitativos de Koppitz

Reflejan las ansiedades, preocupaciones y  actitudes del niño. Algunos indicadores son significativos a cualquier edad, mientras que otros sólo adquieren relevancia a partir de cierta
Se presentan tres tipos distintos de indicadores:
a)      Factores referentes a la calidad de los DFH.
b)      Detalles especiales que no se dan habitualmente en los DFH.
c)       Omisiones de indicadores esperados en un determinado nivel de edad.


A continuación se presentan los 30 indicadores emocionales planteados por Koppitz:


Factores referentes a la calidad de los DFH
Interpretación de indicadores
Integración pobre de las partes
Inestabilidad emocional, personalidad pobremente integrada, impulsividad o dificultad en la coordinación viso-motriz.
Sombreado de la cara
Ansiedad, sentimientos de devaluación.
Sombreado del cuerpo, extremidades o ambos
Ansiedad, problemas psicosomáticos, aéreas generales de preocupación.
Sombreado de manos, cuello o ambos
Angustia por una actividad real o fantaseada con las manos, dificultades de control de impulsos.
Asimetría marcada de las extremidades
Dificultades en la coordinación viso-motora, que pueden deberse a impulsividad, aunque en ocasiones también se relaciona con daño neurológico.
Figuras inclinadas
Inestabilidad y falta de equilibrio, sugiere que al pequeño le falta una base firme que le brinde seguridad emocional.
Figura pequeña (5 cm o menos)
Timidez, asociado con la inseguridad, retraimiento o depresión.
Figura grande (23 cm o más)
Falta de límites, necesidad de llamar la atención, inmadurez, controles internos deficientes o ambos.
Transparencias
Impulsividad e inmadurez neurológica y emocional. Si la transparencia se ubica en una zona corporal especifica, puede indicar angustia, conflicto o miedo agudo, por lo común con respecto a lo sexual o mutilación corporal.




Figura grande (23 cm o más)






Figura pequeña (5 cm o menos)




Sombreado de la cara




Detalles especiales que no se dan habitualmente en los DFH
Interpretación de indicadores
Cabeza pequeña
Sentimientos de inadecuación intelectual.
Ojos bizcos o desviados
Hostilidad, presente en niños rebeldes.
Dientes
Agresividad.
Brazos cortos (no llegan a la cintura)
Dificultad para conectarse con el mundo exterior y con los que lo rodean, tendencia al retraimiento.
Brazos largos (llegan hasta las rodillas)
Actitud agresiva generalizada o expansividad.
Brazos pegados al cuerpo
Control interno rígido y dificultad para relacionarse con los demás
Manos grandes
Conductas agresivas y actividades en las que estén implicadas las mismas.
Manos omitidas
Preocupación e inadecuación por temor al castigo o sentimiento de culpa.
Piernas juntas
Rigidez, dificultad en el control de impulsos y, en ocasiones, temor a sufrir algún ataque sexual.
Genitales
Signo importante de psicopatología, indica agresión y dificultad en el control de impulsos
Monstruo o figura grotesca
Sentimientos de inadecuación y un pobre concepto de sí mismo, tienden a percibirse como distintos de los demás.
Dibujo espontaneo de tres o más figuras
Bajo rendimiento o daño neurológico, implica un tipo de perseveración.
Nubes
Ansiedad, se  sienten presionados por sus padres o por el ambiente. Se asocia con trastornos psicosomáticos.




Nubes



Brazos cortos




Cabeza pequeña y Omisión de las piernas

Omisiones de indicadores esperados en un determinado nivel de edad
Interpretación de indicadores
Omisión de ojos
Signo clínico. Se encuentra en niños aislados que tienden a refugiarse en la fantasía por que no quieren aceptar una realidad dolorosa o frustrante.
Omisión de nariz
Timidez, conducta retraída y ausencia de agresividad manifiesta.
Omisión de boca
Inseguridad y angustia y, en ocasiones, resistencia pasiva al ambiente.
Omisión de cuerpo
Inmadurez severa, retraso en el desarrollo, daño neurológico o una aguda ansiedad relacionada con el cuerpo, probablemente por temor al castigo.
Omisión de brazos
Ansiedad o culpa por conductas socialmente inaceptables que implican las manos y los brazos.
Omisión de las piernas
Intensa angustia o inseguridad.
Omisión de los pies
Sentimientos de poca valía e inseguridad por no tener donde apoyarse
Omisión de cuello
Inmadurez, impulsividad y controles internos pobres.




Omisión de brazos




Omisión de nariz



Interpretación clínica
Para interpretar cualquier dibujo hay que conocer no solo la edad y el sexo del niño, sino su historia clínica, cual es el ambiente que lo rodea y cómo es su familia.
La interpretación clínica resulta individual y única.
Se pueden tomar en cuenta algunos aspectos generales como:
·         La manera en la que se hizo el dibujo
·         Los signos y símbolos empleados (que revelan el retrato interior del niño y muestran su actitud)
·         A quien dibuja es la persona de más interés e importancia para él.
·          La figura en los DFH no es niño ni niña (son menores solos y tristes que no se consideran a sí mismos dignos de interés).

martes, 9 de julio de 2013

Muestras de DFH


A continuación se muestran algunos DFH con el fin de evaluar el nivel de maduración con base en las - escalas de koppitz



 






Prueba del dibujo de la Figura Humana (DFH) de Koppitz

Prueba del dibujo  de la Figura Humana (DFH)
Es un instrumento que permite valorar tanto aspectos de maduración,  como intelectuales y emocionales. Dentro de estas pruebas una de las más útiles para este nivel se encuentra el Dibujo de la Figura Humana.
La expresión pictórica y grafica ha constituido una forma de expresión del ser humano susceptible de analizarse, ya que a través de esto el individuo expresa lo intimo de su ser.
Esta prueba calificada a través de la técnica de Elizabeth Koppitz, permite evaluar aspectos emocionales, así como de la maduración perceptomotora y cognoscitiva. Tanto su aplicación como su calificación son sencillas y rápidas, a demás de que se vale del dibujo que, en general es una actividad atractiva por el pequeño.
El dibujo debe contemplarse desde dos perspectivas: en la primera el dibujo cuenta lo que alguna persona en particular es en un momento dado, integrando tanto el pasado como la historia personal. Desde una segunda perspectiva, el dibujo es la imagen del objeto y constituye una de las modalidades  de la función semiótica, dibujar es expresar con marcas, imágenes u otros signos, lo que a veces no es posible decir con palabras. El dibujo tiene entonces una función de comunicación.
En un dibujo libre, sin modelo, el individuo expresa su mundo interno, su espontaneidad, rigidez, creatividad y destreza. Esto es, cómo se percibe a si mismo en relación con el ambiente.
Cuando se usa la técnica del dibujo de la figura humana  para la evaluación intelectual del niño, se valora el grado de madurez psicomotriz como un componente importante del desarrollo intelectual.


Fundamentos de la escala de Koppitz
Según koppitz, es posible dar una significación tanto de desarrollo como proyectiva, a los indicadores que se muestran en al Dibujo de la Figura Humana.
Los DFH reflejan primordialmente el nivel de desarrollo del niño y sus actitudes interpersonales (hacia si mismo y hacia las personas significativas en su vida); las actitudes del niño hacia las tensiones y exigencias de la vida y su modo de enfrentarlas. Es posible que los dibujos también reflejen los intensos miedos y ansiedades que pueden afectar consciente o inconscientemente en un momento dado.
Los DGH reflejan  el estadio actual de desarrollo mental, a demás de las actitudes y precupaciones en un momento dado, lo que tal vez cambie con el tiempo, gracias a la maduración y la experiencia.
La importancia de los DFH está dada por su sensibilidad para detectar estos cambiosen el niño y se toma como un retrato de éste en un momento dado.
La estructura del dibujo de un niño pequeño  la determina su edad y nivel de maduración, mientras que el estilo del dibujo refleja sus actitudes y aquellas preocupaciones que son más importantes  para él en ese momento.
Los DFH del mismo sexo del niño, tienden a ser superiores en calidad que los del sexo opuesto. También la mayoría de los DFH realizados primero serán mejores que los siguientes. Esto llevó a Koppitz a limitar la prueba a un solo dibujo de una persona completa. Koppitz propone 30 indicadores de desarrollo y 30 indicadores emocionales que deben evaluarse en el dibujo del niño.


Aplicación de la prueba
La prueba puede aplicarse individual o colectivamente.  Es preferible la aplicación individual, dado que permite observar la conducta del niño.
Al aplicar la prueba, el examinador debe sentar al niño de manera confortable frente a un escritorio o mesa completamente vacía, presentarle una hoja de papel en forma vertical y un lápiz del No. 2 con goma de borrar.

Consigna
“Quiero que en esta hoja dibujes una persona completa. Puede ser cualquier clase de persona que quieras dibujar, siempre que sea una persona completa, y no una caricatura o una figura hecha con palitos”.
En el caso de niños pequeños, quienes muchas veces no son capaces de entender el significado de la palabra persona, se puede agregar: “puedes dibujar un hombre o una mujer, o un niño o una niña, lo que te guste dibujar”.
No hay tiempo límite para la prueba, el niño es libre de borrar, cambiar el dibujo o voltear la hoja, si lo desea.
Es recomendable que el examinador observe la conducta del niño mientras dibuja y tome notas de las características inusuales, la secuencia de su dibujo, la actitud del sujeto y sus comentarios espontáneos, así como el tiempo empleado y la cantidad de papel utilizado. Si un pequeño queda insatisfecho con su dibujo se le deja empezar de nuevo en el reverso, o en una segunda hoja si lo pide. No se debe permitir que el niño tome modelos para su ejecución.

Indicadores acerca del desarrollo del niño en la prueba
Los indicadores del desarrollo que corresponden a cada edad se presentaran en pocos DFH de niños ubicados en un nivel de edad menor, aumentando la frecuencia de éstos a medida que se incrementa la edad de los pequeños.
·         Indicadores del desarrollo esperados: Se presentan con una frecuencia de 86% o más en de los dibujos de terminada edad
·         Indicadores del desarrollo excepcionales: aparecen en 15% o menor en los dibujos de determinada edad
·         Indicadores del desarrollo comunes: entre 51% y 85% en una determinada edad
·         Indicadores del desarrollo frecuentes: 16% y 50% en una determinada edad



  Indicadores de niños



Indicadores de niñas




Calificación
Para calificar el DFH de acuerdo con los criterios de Koppits , se toman en cuenta únicamente los indicadores esperados y excepcionales para cada rango de edad.
El procedimiento que sigue es que a cada dibujo se le otorga una constante de 5 puntos y se le resta un punto a la misma por cada indicador esperado que no se encuentre presente en el dibujo. Cuando en el dibujo aparecen indicadores excepcionales, a la constante de 5 se agrega un punto por cada uno de ellos.
Una vez que se puntean los indicadores esperados que no están presentes y aquellos excepcionales que aparezcan, se obtiene una calificación total para cada menor, el nivel de maduración puede interpretarse de acuerdo con los siguientes parámetros.
·         8 o 7 puntos: normal alto a superior.
·         6 puntos: normal a alto.
·         5 puntos: normal.
·         4 puntos: normal bajo.
·         3 puntos: normal bajo.
·         2 puntos: bajo.

·         1 o 0 puntos: inferior debido a serios problemas musculares.